En algunos pacientes en los que el crecimiento ha sido desfavorable, suelen encontrarse discrepancias entre el maxilar y la mandíbula, es decir el hueso maxilar superior no crece bien y se queda retrasado por lo que la mandíbula se ve prominente. También pueden quedar fistulas (comunicaciones) residuales palatinas o alveolares o separación de los segmentos maxilares.

Si la discrepancia es leve podemos intentar solucionarlo con ortodoncia, pero si es moderada o severa es conveniente combinar ortodoncia con cirugía ortognática. Esto se realiza al final del crecimiento; en las niñas suele ser alrededor de los 18 años y en los varones a los 19-20.


Se comenzará con ortodoncia prequirúrgica, para entrar en quirófano con brackets y  realizar la intervención que puede ser de avance del maxilar superior, o bien actuar en el maxilar y la mandíbula. Después de la cirugía se termina la ortodoncia y el caso con una buena estética y función tanto facial como dental

 

En el adulto:

ortodoncia + cirugía ortognática